Una medida cautelar judicial obliga a la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas AIC) a utilizar “todos los resortes administrativos pertinentes y adecuados en conjunto con el Estado Nacional, las provincias de Río Negro y Neuquén, para que en el término de seis meses presente un plan de remediación y saneamiento de la cuenca formada por los ríos Limay, Neuquén y Negro”.
Ese plan deberá tener “un claro proyecto ejecutivo con plazos y tramos a remediar”, según informaron fuentes parlamentarias nacionales, aludiendo al amparo ambiental presentado por varios representantes políticos y vecinos rionegrinos ante el Juzgado Federal de General Roca, el 15 de septiembre de 2016, con el acompañamiento de la senadora Odarda, concejales de varias localidades y vecinos.
Informaron además que ya se realizó la notificación de la medida cautelar a la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas, con sede central en la ciudad de Cipolletti,
Odarda expresó “lo significativo de la notificación, en función de que la AIC tiene una cuenta regresiva para la presentación de tan importante proyecto esperado por muchos rionegrinos, que se sienten indignados por la contaminación de los ríos mencionados”.
Al expediente se sumaron como adherentes al amparo ambiental más de 10.000 firmas que fueron reunidas en el transcurso del verano en diferentes localidades de la provincia, muchas de ellas en los balnearios del río Negro.
Esas firmas fueron recolectadas teniendo en cuenta que la resolución del 12/10/2016 emitida por la jueza Carolina Pandolfi, impulsa la participación y control de los ciudadanos de esta problemática ambiental.