El gremio docente rionegrino UnTER observó que desde el Gobierno provincial “gastan dinero en poner amigos y ex funcionarios en el sistema educativo para que les sirva de correveidile, que en buen romance significa orejero” y señaló que se trata de las designaciones de Luis Ríos, como “coordinador de coordinadores” de Consejo Escolar y de José Luis Martínez, en una comisión de investigación de los CEM rurales.
A continuación el comunicado de la UnTER
En educación hay carencias notables: pésimo funcionamiento del transporte escolar, que pone en riesgo la vida de estudiantes; cargos sin cubrir, comedores escolares sin insumos necesarios para que niños y niñas puedan tener la ración de comida; por estos motivos, las escuelas de jornada completa funciona a medias, escuelas secundarias que aún no iniciaron el ciclo lectivo correctamente, por el empecinamiento total del gobierno.
Mientras tanto, gastan dinero en poner amigos y exfuncionarios en el sistema educativo para que les sirva de correveidile, que en buen romance significa orejero, como son las designaciones de Luis Ríos, como coordinador de coordinadores de Consejo Escolar y de José Luis Martínez, en una comisión de investigación de los CEM rurales.
Ya demostrado está que no existe ética en los funcionarios del Consejo Provincial de Educación, así que esta estructura que empieza a organizarse es claramente un esquema paralelo de persecución a los trabajadores y las trabajadoras de la educación.
Todo se inventa para poner a los amigos, que antes fueron dirigentes gremiales, como los docentes mencionados y que junto al expulsado Marcelo Mango fueron artífices de la entrega del sindicato al gobierno actual.
Tal es el caso de Luis Ríos, funcionario que hizo alarde de ineptitud cuando fue director de Educación primaria. Que además determinó ordenes de persecución, como lo hizo en la Escuela Primaria de Ñorquinco, entre otros ejemplos de autoritarismo. Ahora, desde inicio de año, cumple el papel de coordinación de los Coordinadores de Consejo Escolar. ¿Qué función es ésta?, ni siquiera está especificada en la resolución de nombramiento, por consiguiente, se puede entender que es un cargo para control partidario en las instituciones escolares, disciplinar a quien intente generar un desvío de las órdenes del sistema.
Hace unos días, a partir de la publicación de otra resolución, nos enteramos de la incorporación de otro ñoqui, esta vez el técnico José Luis Martínez, en una comisión de investigación sobre la implementación de los Centros de Enseñanza Media Rural.
A esta comisión se le negó la participación a UnTER, mientras que se acomodó a Martínez, docente que posee todos sus cargos en secundaria de orden técnico y jamás participó en una Escuela Secundaria Rural.
En pleno conflicto por condiciones laborales y salariales entre UnTER – Gobierno, esto es un afrenta porque parece una devolución de favores. Sumado a las innumerables comunicaciones que andan dando vueltas en todos los órdenes, con el objetivo de presionar, imponer verticalidad y autoritarismo puro. Este gobierno, que se llena la boca declamando, supuestamente, la democracia educativa, demuestra, a través de estos casos, cómo y para qué gasta el dinero.
Como consejo directivo central adherimos a la acción política realizada en Cipolletti, en el marco de las medidas provinciales del 5 y 6 de abril, definidas en el último Congreso de UnTER, en la que reclamaron en un comunicado por la creación de cargos para decenas de funcionarios en el Ministerio de Educación, pero que no crean los cargos docentes necesarios. Mientras tanto siguen designando cientos de nuevos funcionarios con funciones desconocidas y algunos, como el caso de Luis Ríos, que hasta se desconoce cuánto cobra.
Gral. Roca – Fiske Menuco, abril de 2017
Héctor Ronallo, vocal
María Inés Hernández, secretaria de Prensa, Comunicación y Cultura
Benjamín Catalán, secretario gremial y de Organización
Marcelo Nervi, secretario adjunto
Patricia Cetera, secretaria general