En abril de 2015, alrededor de las 05:10 en Cipolletti, un automovilista, de 34 años, que se movilizaba en una camioneta tipo 4×4 marca Dodge, previo cruzar un semáforo en rojo, atropelló a un hombre que circulaba en una motocicleta.
El rodado menor y el motociclista quedaron “enganchados” debajo de la camioneta, por lo que el imputado realizó una maniobra dando marcha atrás para liberarse de la motocicleta y, una vez logrado, se dio a la fuga sin auxiliar al hombre que falleció por las lesiones sufridas.
En una audiencia de presentación de pruebas ,desarrollada la semana pasada, según se informó el lunes, la defensa del imputado solicitó la suspensión de juicio a prueba por un homicidio culposo. Pero, la fiscal Eugenia Vallejos se opuso argumentando que por las circunstancias en las que sucedió el accidente de tránsito no correspondía aplicar dicho beneficio. “Debemos tener en cuenta la naturaleza y peligrosidad de la acción”, afirmó la funcionaria judicial.
La representante del Ministerio Público explicó que teniendo en cuenta la política de persecución penal, a la Fiscalía le interesa que este tipo de casos sean debatidos en juicio y, en consecuencia, solicitar que se aplique una condena a prisión efectiva.
En este sentido, destacó que no se trata de un hecho culposo como en los que normalmente se podrían aplicar beneficios procesales como el criterio de oportunidad o la suspensión de juicio a prueba, porque “no se trata de un simple accidente de tránsito en el cual automovilista realizó una maniobra imprudente o realizó un mal cálculo”.
La funcionaria entendió que el conductor actuó con temeridad en su accionar debido a que, según indicaron testigos, cruzó un semáforo en rojo, atropelló a la víctima, maniobró para “desengancharlo” mientras yacía en el suelo atrapado por el tren delantero de la camioneta, para posteriormente darse a la fuga sin brindarle ningún tipo de auxilio.