El 13 de abril de 2011, un sujeto aseguró ser presidente del Club del Trueque en Bariloche y ofreció a un grupo de jubilados un paquete turístico cuyo destino era la provincia de Córdoba, con siete días con alojamiento, pasajes y comida incluídos.
Al momento de salir de viaje los jubilados advirtieron que habían sido víctima de una estafa, porque los ómnibus no estaban en el lugar convenido y nadie de la empresa se hallaba en el lugar.
Ayer, mediante la intervención del fiscal jefe barilochense Martín Lozada, por convenio pleno celebrado con la defensa del acusado acordó la condena a la pena de tres años de prisión para el estafador, cuya identidad no trascendió oficialmente.
El acusado, acompañado por el defensor oficial Marcelo Alvarez Melinger asumió la responsabilidad en el hecho y su participación en el mismo y además aceptó la calificación legal escogida por la Fiscalía.
El Tribunal, presidido por el juez de juicio Marcelo Barrutia e integrado además por Emilio Riat y Bernardo Campana, aceptó la viabilidad del juicio abreviado y dictó la sentencia correspondiente.
Banco debe pagar a una clienta más de $27.000 por “conducta ofensiva”
En una acción denominada de “menor cuantía”, la jueza de Paz de Cipolletti Gabriela Lapuente condenó al banco Santander Río SA a abonar a una mujer la suma de $19.730 en concepto de daño directo y $8.000 por daño punitivo, más intereses.
La cliente poseía una tarjeta de crédito del Banco City, luego absorbido por Banco Santander Río SA Según consignó la damnificada en la demanda, la forma usual de pago de la tarjeta de crédito Mastercard era a través de la red link mediante una caja de ahorros que además poseía en el Banco Nación.
Sin embargo, a partir de agosto de 2017 no pudo utilizar más ese medio de pago y en el Banco Santander Río le informaron que debía pagar mediante el cajero externo de la sucursal, con las “interminables” filas de gente que concurre allí, consignó la clienta en su demanda.
Cómo esa modalidad no le resultaba cómoda, la mujer continuó abonando por red link hasta que la intimaron y le reclamaron el pago de la tarjeta. A través de un correo electrónico le informaron que los pagos no estaban ingresados. En consecuencia debió concurrir a la sucursal de Neuquén.
Luego de reiteradas gestiones, tanto en la sucursal de Cipolletti como en la de Neuquén, se manifestaron en el sentido de que el inconveniente debía ser solucionado por la red link , o el Banco de la Nación Argentina, ya que eran ellos quienes no habían imputado los pagos, a pesar de que ella tenía los comprobantes.
La jueza, como primera medida, fijó una audiencia de conciliación pero el Banco Santander Río no envió a ningún representante y la instancia se frustró.