El 17 de marzo pasado, alrededor de las 18.00, se llevó a cabo un partido de fútbol entre un club roquense y otro de Catriel, en el estadio “Zit Formiga”, ubicado en San Luis y Don Bosco de la ciudad de General Roca. Inmediatamente después de terminado el encuentro, un grupo de simpatizantes de Catriel, que había concurrido a presenciar el partido, se retiró de la cancha en una camioneta Transit.
“Se dirigieron por calle San Juan hacia el Sur, al llegar a la rotonda de Gelonch y San Juan, se aproximó un automóvil conducido por uno de los imputados que era acompañado -entre otras personas- por el otro sujeto acusado”.
“El conductor del Volkswagen, previo sobrepasar al móvil policial que acompañaba a la camioneta, colocó el vehículo a la par de la misma y comenzaron a arrojarle piedras, ocasionándole la rotura de varios vidrios. Concretada dicha acción, se dieron a la fuga por San Juan hacia el Norte, siendo perseguidos por el patrullero policial, hasta que se les dio alcance en la calle Ayala y Urquiza, lugar en que se procedió a la aprehensión”.
La calificación legal propuesta por la Fiscalía fue de daño en los términos del artículo 8 en función del artículo 1° de la Ley Nº 23.184, actualizada por la Ley 24.192, régimen penal y contravencional para la prevención y represión de la violencia en espectáculos deportivos, siendo ambos sujetos responsables a título de coautores, conforme las previsiones del artículo 45 del Código Penal.
Ahora, el fiscal del caso Ricardo Romero, a través de un acuerdo con la defensa penal pública y privada, solicitó que se les prohíba a dos sujetos asistir a eventos deportivos futbolísticos donde juegue el club del que son simpatizantes por el término de un año.
“Además de lo anterior, no deberán cometer nuevos delitos, depositar la reparación económica al damnificado, y presentarse cada tres meses en la dependencia policial próxima al domicilio enunciado en la audiencia”, explicó Romero.
Tanto el defensor público penal Miguel Salomón como el privado prestaron su consentimiento junto a sus asistidos y, de esta manera, el juez Gastón Martín declaró razonable el planteo realizado por las partes.