La medida de fuerza se concretó por la presunta mala liquidación de las quincenas de los operarios. Este viernes habrá una audiencia de conciliación del gremio y las empresas Techint y Sacde (UTE constructora) para buscar una solución. En vez de cobrar 32.000, 40.000 pesos o un poco más, les hubiesen correspondido 140.000, 150.000 o 170.0000 pesos, según los casos, trascendió extraoficialmente.
El gremio Uocra paralizó el jueves las obras de construcción del gasoducto Néstor Kirchner, a la altura del yacimiento Entre Lomas, ubicado cerca de la ruta 151, en el camino a Catriel. Los trabajadores del sector solo permitieron el acceso de camiones con tramos de los caños que se utilizan para el emprendimiento.
Las medidas de fuerza comenzaron a primera hora de la mañana, con lo que las tareas han permanecido inactivas durante prácticamente toda la jornada laboral.
Para este viernes está convocada una audiencia de conciliación en la sede de la Secretaría de Trabajo de la Provincia en Cipolletti, donde comparecerán representantes del sindicato y de la UTE conformada por las empresas Techint y Sacde, a cargo de la construcción del estratégico gasoducto.
El dirigente sindical Juan Garrido manifestó que la reacción de su gremio y de los obreros se debe a “la mala liquidación de los haberes del personal, una situación que se viene repitiendo hace un tiempo, cuando les llega el momento de cobrar”.
“Indicó que resultó penoso y alarmante para los trabajadores constatar que esta vez se les pagaban salarios por la quincena de 32.000 o 40.000 pesos, o un poco más, cuando les hubiesen correspondido montos de 140.000, 150.000 o 170.0000 pesos”.
Enfatizó que “el personal cumple al máximo con sus responsabilidades laborales, haciendo el 100 por ciento de las horas asignadas y sin dejar de desarrollar sus funciones, incluso los fines de semana. Con todo eso, logran generarse ingresos dignos que, lamentablemente, después no se ven reflejados en los pagos, producto de las malas liquidaciones que efectúan las empresas que los contratan”.
Fuente: La Mañana de Cipolletti