“Estás offline, salís del sistema y entrás a otro mundo”, dice Mailén Hughes, desde su pequeña y acogedora biblioteca de adobe en Piedras Coloradas, a 5 kilómetros al Sur de Las Grutas, Río Negro.
Nació aquí y su padre fue el primero en ver la belleza que encierra esta costa con grandes formaciones de roca rojiza y aguas transparentes a las que se les atribuye poderes energéticos. Solo viven cuatro habitantes, ella y su hija forman la mitad de la población. La llaman la playa roja de la Patagonia.
“Para nosotros es una playa literaria”, afirma Hughes. Las Grutas desde Piedras Coloradas se ve como si fuera una ciudad hecha de luz, su resplandor se refracta en el cielo y se refleja en el mar, es un destino consolidado. “Acá todo es silencio, de noche dormís con el susurro de las olas”, dice Mailén. Fui y caminé por este paraíso, vía @lanacioncom Edita @fermassa7 El link con la nota:
https://www.lanacion.com.ar/…/la-playa-roja-de-cuatro…/
Texto (resumido): Leandro Vesco, periodista en Buenos Aires