El periodista Martín Marín reunió testimonios sobre la vida y obra del llamado “Hermano de los pobres” y presentará su creación hoy, en Viedma, a las 20, en el Centro Cultural Carlos Gardel.
El periodista Martín Marín, oriundo de Villa Mercedes (San Luis) y autor de un libro y un documental sobre la vida y obra de Don Artémides Zatti, recorrió más de 10 mil kilómetros de la Argentina –desde Trelew a San Juan– con el objetivo de difundir el mensaje del único argentino laico consagrado Santo y canonizado por el Papa Francisco.
Tanto el libro como el audiovisual, llamados “Artémides Zatti Santo. El pariente de todos los pobres. Creí. Prometí. Sané”, cuentan con 25 valiosos testimonios que el investigador logró reunir y que son fuentes directas que recuperan el mensaje de quien dedicó su vida a quienes más lo necesitaban.
La presentación estará a cargo de Marín y contará con la presencia de la sobrina bisnieta de Zatti, Ana María Zatti, y su compañero Edgardo, ya que los tres están a punto de iniciar un proyecto común: recorrer la Ruta 40 con los ejemplares impresos y llevarlos a las parroquias del camino.
Artémides Zatti nació en Italia, vivió tres años en Bahía Blanca adonde llegó con su familia y pasó casi toda la vida en Viedma. Antes de ser enfermero quiso ser sacerdote, pero mientras cursaba sus estudios contrajo tuberculosis. Entonces prometió a María Auxiliadora que si lo curaba entregaría su vida a los pobres y enfermos. Y así lo hizo. Por eso el lema Creí, prometí, sané.
En el hospital salesiano San José, situado donde hoy se encuentra el obispado de Viedma, acompañó al padre Evasio Garrone, quien fue el primer gran fundador de este primer gran hospital de la patagonia. Tras la muerte de Garrone, Don Zatti asumió toda la gran labor del hospital y luego alcanzó a trabajar unos años en el nosocomio de la capital rionegrina. Su servicio no se limitaba al hospital sino que se extendía a toda la ciudad donde vivió desde su llegada hasta su partida el 15 de marzo de 1951.
En diálogo con La Nueva., Marín, quien empezó a recorrer este camino en la prensa a los 12 años en su ciudad natal y además se desempeña como productor de programas de radio y televisión, adelantó algo sobre este material inédito que luego de estrenarse en Viedma será también difundido en Bahía Blanca en el Centro Cultural de la Cooperativa Obrera (Zelarrayán 560) el 15 de abril, un día después de que se conmemoran los 22 años de la beatificación de San Artémides Zatti, a las 19.
–¿Qué lo motivó a llevar adelante estos proyectos?
–En mis 35 años de labor en la prensa primero en San Luis y luego en Buenos Aires siempre tuve como objetivo lograr ser un puente de contacto con la gente y con aquellas obras que nos permitan mirar el bien como verdadera riqueza de una sociedad.
Es por ello que, hace 10 años, pensé que la mejor forma sería dejando un mensaje que pueda renovar nuestra fe, esperanza y amor. Desde entonces mis proyectos tienen una sóla mirada, desde la fe, como faro, a la gente. San Artémides Zatti encarna ese objetivo, es el mejor ejemplo..
El principal objetivo es difundir la obra de Don Artémides Zatti, poder evangelizar a Zatti, llevar los 25 testimonios que forman parte de este trabajo a los colegios, a las parroquias y a diferentes lugares. Siempre lo pensé como un proyecto grande que no tuviese un techo, en dejar que adelante pudiera ir Don Artémides guiándonos y nosotros atrás o al lado.
–¿Cuáles fueron las principales fuentes de información?
–Las fuentes fueron los 25 testimonios que reúne el guión para el documental. Son testimonios de personas que lo conocieron y también de hijos y nietos que lo conocieron a través de los relatos de sus abuelos o padres. Son fuentes precisas y directas. A través de su mensaje y su aporte logramos este documental y luego de allí nació el libro.
–¿Cómo fue la etapa de materializar las obras?
–” Hice todo a pulmón. Sólo y con pocos recursos terminé el Documental, con la ayuda de mi Familia y de Marcela y su Familia, una Amiga que me impulsó y me ayudó a realizar esta Obra desde el primer instante. Es más fue la gran visionaria en este proyecto. Luego Ana María Zatti fue el motor que me impulsó a seguir cuando no encontraba puertas abiertas. Ahí empecé a hablar con las imprentas y surgió una que le cautivó la historia y me dijeron ” te vamos a ayudar”. Entonces pude imprimir los primeros mil libros con la idea de llevar el audiovisual y el libro a los colegios salesianos y parroquias.
–¿Logró concretar este objetivo? ¿Qué lugares visitó?
–Viajé desde Trelew a San Juan, pasando por Córdoba, Mendoza, San Luis y Buenos Aires, con este primer ejemplar con la idea de elaborar una agenda de visitas de presentación en los colegios salesianos. Esto no se dio porque justo terminaba el ciclo lectivo y los directivos estaban con sus agendas ya priorizadas. Quedamos en que este año nos íbamos a volver a reunir.
Es un gran sueño y una obra pensada para los jóvenes que cumple ese objetivo de llevar el mensaje de la vida y obra de Don Artémides en un lenguaje simple, con muchas fotografías y testimonios de gente que lo conoció.
–¿Hay más alternativas para seguir adelante con la difusión?
–Si, como no he tenido respuesta de los colegios emprendimos junto a una gran evangelizadora y quien es sobrina bisnieta de Zatti, la señora Ana María Zatti, un nuevo camino.
La idea es recorrer junto ella y a su compañero, Edgardo, la Ruta 40 de punta a punta, llevando los ejemplares a las parroquias y el mensaje de Artémides Zatti, que es un mensaje de amor que no se queda en el dolor, ni en la injusticia, ni en la prueba; sino que emerge por sobre ellos y que se dispone a abrazar a todos, como lo pide hoy el Papa Francisco.
–¿Podría contarnos algo más sobre Artémides?
–Artémides fue un hombre que recorrió con su bicicleta diferentes escenarios, que dejaba la puerta abierta, cuya iglesia fue su hospital y en su hospital supo recibir y abrazar a todos entregando más de una vez su propia cama, su propio colchón, durmiendo él en el piso, pero priorizando el dolor de los demás donde veía también el dolor de Jesús crucificado.
Artémides vio en sus hermanos y enfermos de la comarca y de toda la gran región a jesuses. Era común escucharlo decir y pedir “Una ropita para un jesusito de 5 años o para un Jesús de 40”, porque de verdad él lo sentía así. Bajaban de la cruz, estaban en el camino y había que abrazarlos y quien salió a brindar ese abrazo fue Artémides.
–A lo largo de su investigación ¿qué fue lo que más le sorprendió o asombró sobre su vida?
–Lo que más me asombró de la vida de Artémides Zatti, paradójicamente, fue su final. Tuvo una vida entregada a los más humildes, a los más pobres materialmente hablando pero quienes, en definitiva, demostraron ser los más ricos y los más agradecidos.
Artémides supo entregarse en cuerpo y alma durante largos 50 años. Primero en el hospital, en terrenos donde hoy está el obispado y luego en esa granja salesiana que estaba llena de todo pero le faltaba lo más importante: el hospital. Allí, entre chapas y hierros y los deshechos que habían quedado supo reconstruir ese lugar y armar un hospital que funcionó por 10 años y donde vivió y estuvo al frente.
Llegar a su humilde dormitorio en ese hospital y visitar su lugar de trabajo y la granja de los salesianos me llevó a comprenderlo muchos más, a conocer al Zatti del dolor, el de las lágrimas ocultas, el Zatti de una tierra que si bien lo abastecía de todo el esfuerzo sobrehumano era impresionante.
Cuando muere Artémides Zatti la comarca se despierta, pero se despierta hasta el hogar más humilde, desde la Siberia que le llaman al sector frío de Valcheta, Jacobacci, Sierra Colorada hasta Carmen de Patagones. Y todos, en una sola y misma voz, se unen a acompañar en ese último pasaje terrenal a su amigo don Zatti.
Se estima que se vivió la primera gran manifestación popular al acompañar a Artémides en su regreso a la Casa del Padre. Es impresionante ver las fotografías de aquella época, en 1951. Reconforta tanto sacrificio, saber y sentir que ahí estaba el abrazo que premia, el aplauso que agiganta y el amor de todo un pueblo.
Fue una gran fiesta ese cariño y esa manifestación multitudinaria en las calles de Viedma. Me sorprendió que un hombre que nunca buscó el premio, ni la foto y se mantuvo siempre en el último lugar, ahí estaba, en ese renacer. Ese día nació el Don Zatti Santo. El pueblo entero confirmaba el amor y la entrega de un hombre santo que hizo de su cruz el amor más grande. El pueblo sin que nadie lo llamara ahí estaba, unido a un hombre, a su vecino Santo.
Para mayor información, los interesados se pueden comunicar a su Instagram:@zattielsanto o por mail martinmarinpresenta@gmail.com
Características del libro
Tiene 84 páginas y un formato de 20 centímetros de alto por 60 de ancho, lo que permite que al abrir el libro el lector pueda disfrutar de páginas de 30 centímetros de ancho. Es en papel ilustración, con tapa y color. En el interior es papel ilustración en blanco y negro. Cuenta con fotografías del archivo salesiano y otras que el autor logró reunir con el equipo que lo acompañó en los viajes realizados.
La trayectoria de Martín Marín
Es periodista y productor de programas de radio y televisión. Empezó a recorrer este camino a los 12 años en su querida Villa Mercedes, donde nació.
Su abuelo fue periodista, uno de aquellos grandes hombres de la prensa que se hicieron en el medio. Llegó a ser presidente del Círculo de Periodistas Deportivos de Villa Mercedes.
De niño Martín lo acompañaba a la emisora AM LV15, de Villa Mercedes y a las grandes veladas boxísticas en el palacio José María Gatica, entre otros sitios que le resultaban fascinantes.
Cuando falleció, Martín tenía nueve años y haber vivido tantos hermosos momentos compartidos en su medio, en la prensa, lo llevaron a querer seguir sus pasos (“Quizás porque extrañaba esos abrazos”).
A los 12 años y luego de recorrer muchos estudios logró su primer programa de radio “Burbujas musicales”.
En junio se cumplirán 35 años de una gran labor en los medios siempre de forma independiente.
A la fecha realizó 40 ciclos televisivos y 40 ciclos radiales, escribió 8 libros y estudió en la Universidad Católica de Buenos Aires, lo cual potenció sus habilidades y aportó nuevas miradas sobre diferentes aspectos de su profesión.
Texto: Anahí González Pau, La Nuva, Bahía Blanca
Título original de la nota: El mensaje de Zatti vive: estrenan un libro y un documental inéditos